EL LAMAISMO O BUDISMO TIBETANO

Les hablaré sobre la religión y filosofía del Tibet, les invito a conocer su historia.

El Budismo Tibetano (Vajrayana, Budismo Tántrico o Lamaísmo), es un desarrollo del budismo procedente de la India principalmente, mezclado con el pensamiento autóctono prebudista, como el chamanismo, animismo o las prácticas Bon. Tiene un carácter más enigmático y sus prácticas más complejas que otras corrientes del budismo, con numerosos rituales, mantras, visualizaciones, mandalas, meditaciones, con la intención de lograr la iluminación. El budismo comenzó a conocerse en el Tibet a partir del siglo II o III, pero no consiguió una amplia aceptación hasta el VII, durante el reinado de Songtsen Gampo. Este rey unificó el Tibet, hizo alianzas con China y Nepal, y fomentó el budismo, ordenó construir numerosos templos y traer muchos textos budistas para traducirlos al tibetano, logrando con ello un gran florecimiento, no solo de los estudios budistas, si no también de las demás artes y ciencias, debido a la llegada de importantes especialistas desde la India y China.

En sus comienzos estuvo influido principalmente por dos corrientes del budismo indio, el Mahayana y el Vajrayana proveniente del tantra de Padmasambhava,, otras corrientes como el Hinayana, tuvieron una influencia menor y desaparecieron. La corriente Vajrayana fue la más influyente en la práctica del budismo tibetano. Está compuesta por enseñanzas secretas trasmitidas del maestro a discípulo, y hay dos clases, una rápida y otra más gradual, en función de las dotes de cada discípulo. Debido a la controversia que se generó entre el budismo Mahayana de China y las prácticas Vajrayana del budismo Indio, se realizó un concilio en Lhasa, que era ya la capital, donde se decidió que el Tibet seguiría el modelo budista Indio. A esta época pertenece la tradición Nyingma, heredera de los primeros introductores del budismo en el Tibet. A través de los siglos se desarrollaron en el Tibet diversas corrientes y formas de entender las cosas, que dieron lugar a las diferentes escuelas o tradiciones de pensamiento. Todas tienen una parte de sus enseñanzas y tradiciones en común, sin embargo los métodos usada por sus maestros para enseñar el camino a la iluminación, es diferente en cada una de ellas. Las escuelas principales son cuatro: la Nyingma, la Kagyu, Sakya y Gelug. Hubo además otras escuelas, pero de menor importancia y acabaron siendo absorbidas por alguna de estas. A diferencia del Bön que proviene de las enseñanzas del Tonpa Shenrab Miwoche y que se desarrolló en el Zhang Zhung, (Tibet occidental), las escuelas budistas se basan en las enseñanzas del Buda Shakyamuni y provienen de la India.

(A veces, se usa la silaba "pa" después del nombre de la escuela, por ejemplo, Gelugpa, para denominar a los seguidores de la escuela Gelug, aunque a veces también se hace extensivo a la propia escuela). Escuela Nyingma (Escuela Roja). La escuela Nyingma es la base del budismo en el Tibet y de sus distintas escuelas, fue fundada en el Tibet a mediados del Siglo VII por tres de los personajes más representativos del budismo tibetano: Guru Padmasambhava, Khenpo Santarakshita y el Rey Trisrong Deutsen. Incluye las nueve sendas que enseñó el Buda Shakyamuni,

La escuela Nyingma divide las enseñanzas budistas en nueve vehículos, el último de los cueles es el Dzogchen: tres vehículos comunes, que incluyen las enseñanzas de los sutras del Buda Sakyamuni, los tres tantras externos que incluyen el Kriya Tantra, el Upa Tantra y el Yoga Tantra. Finalmente los tres Tantras internos que comprenden: Mahayoga, el Annuyoga y el Atiyoga, que son la enseñanza más alta de esta escuela, el Dzogchen y exponen que todas las apariencias y los fenómenos son ilusiones de la confusión de la mente. Los primeros seis vehículos son comunes a todas las escuelas de budismo tibetano, los últimos tres, los tantras internos, son exclusivos de esta escuela. Los Nyingmapa, al igual que los Bonpos, consideran al Dzogchen, el nivel más alta de sus enseñanzas.

Escuela Sakya. (Escuela de las rayas) Se fundó en el siglo XI. Sus inicios se dan con la fundación del monasterio Sakya, por Gönchok Gyelpo. Esta escuela es una escisión de la escuela Nyingma, debido a las diferencias sobre las prácticas tántricas. Se conoce también como escuela de las rayas porque las paredes de los monasterios de esta escuela están pintados con rayas negras, blancas y rojas, que representan a los Espíritus Guardianes, a la compasión y al Buda de la sabiduría. Basándose en las recomendaciones de Atisa y con la intención de lograr renovar la pureza de sus enseñanzas, mandó a la India a algunos de sus seguidores, para iniciar unas nuevas traducciones de los tantras.

Escuela Kagyu (Escuela Blanca) Fundada en el siglo XI, comienza con el erudito indio Tilopa. Otros maestros de esta escuela fueron: Naropa, Marpa y Milarepa. Como sus fundadores vestían ropas blancas, el grupo se llama también Escuela Blanca. Concedió mucha importancia a la práctica tántrica, la cual según ellos se transmitía de manera oral. La máxima enseñanza de esta escuela es el Mahamudra. Tradicionalmente estaba dividida en cuatro escuelas mayores, y ocho escuelas menores, algunas de las cuales sobreviven hoy en día. Algunas de las prácticas más importantes son las conocidas como los Yogas de Naropa, que incluye la práctica del cuerpo ilusorio, el yoga de los sueños o la práctica de la luz clara.

Escuela Gelug (Escuela Amarilla). Es el resultado de la fusión de varias escuelas anteriores. Fue fundada por Tsong Khapa Losang Drakpa (1357-1419) una de las figuras más destacadas de la historia del budismo tibetano. La aportación de Tsong Khapa al budismo consiste en las reformas del budismo tibetano, dando mayor énfasis en la disciplina monástica y las reglas originales del vinaya, la importancia del estudio y las prácticas tántricas renovadas, aplicadas a la vida monástica.
Desde el siglo XVII, los gelugpa llevan el liderazgo político del Tíbet. El título honorífico de Dalai Lama (Océano de Sabiduría) se otorga a los dirigentes de los esta escuela desde 1578. Actualmente es el lama Tenzin Gyatso.

Ahora nos centraremos en la filosofía del Lamaísmo.

En el budismo tibetano existen una serie de pasos preliminares para que los que buscan la iluminación puedan conseguirlo de una manera correcta. Hay dos modalidades de prácticas preliminares: las comunes y las especiales. Las cuatro prácticas preliminares ordinarias. También se llaman "los cuatro pensamientos que cambian la mente". Se trata de llegar a una comprensión plena de lo que significan estas reflexiones y sirven como base para una actitud de renuncia y una práctica constante en el altruismo, son los siguientes:

- La existencia humana es preciosa. Nuestra existencia es difícil de conseguir y fácil de perder. Hay ocho estados condicionados en los que no existe la posibilidad de tener libertad, ni oportunidades. El haber renacido como humanos es una gran suerte porque es muy difícil, disponemos de la libertad y de la oportunidad necesarias para desarrollarnos y seguir una actitud para conseguir la iluminación.

- La impermanencia y la muerte. Tenemos que concienciarnos de la muerte, del cambio y de la impermanencia de todas las cosas. Todo cambia, nada permanece, nuestra vida es frágil, temporal y el momento de la muerte es incierto, no debemos perder el tiempo apegándonos a lo que sin duda perderemos, ya que nuestro tiempo de vida es dudoso. Esto nos permitirá acercarnos a la muerte con una actitud mejor.

- El Karma y sus consecuencias. Existe una relación causal que vincula las acciones con sus consecuencias. Una acción virtuosa es causa de felicidad, una acción no virtuosa es causa de sufrimiento, debemos actuar de la forma mas virtuosa para nosotros y para todos los demás.

- Conciencia del sufrimiento de la existencia. Tenemos que concienciarnos de las limitaciones del samsara, el ciclo de los renacimientos condicionados. La esencia de nuestra existencia es el sufrimiento, sufrimos al nacer, al envejecer, al enfermar y al morir. Los que carecen de algo sufren por conseguirlo, los que tienen poco sufren porque quieren más, los que tienen suficiente sufren para conservarlo, y al final todos perdemos lo que tenemos.

Al llegar a una comprensión profunda y sincera de estos cuatro preliminares se está preparado para iniciar los siguientes.

Los Cuatro preliminares extraordinarios. También se conocen como "las cuatro Grandes Tareas", consisten en cuatro prácticas que hay que repetir un número determinado de veces.
- La práctica de la toma de refugio. Para emprender la práctica espiritual necesitamos ayuda y lo primero es buscar refugio en las llamadas tres joyas, que son: el Buda, del Dharma y el Sangha, y en las tres raíces: el Gurú, los Yidam y las Dakinis y protectores del Dharma.

- La práctica de la meditación de Dorje Sempa. Es una práctica de purificación.

- La práctica del mandala. Es una práctica de acumulación de mérito.
- Práctica del Guru Yoga y de devoción al Guru. Hay que precisar que para la prática del Vajrayana es imprescindible tener un maestro calificado, es importante que pertenezca a un linaje puro y que tenga auténticas cualidades como la compasión, que no dé importancia al éxito o al fracaso, al beneficio o a la pérdida, a las alabanzas o las críticas, al placer o al dolor, es decir que sea ecuánime, que tenga paciencia y que sea incansable en el trato con sus discípulos y en difundir el Dharma.

A la conclusión que llego es que la filosofía del Lamaísmo, es su virtud de combinar enseñanza con práctica y hacerla una forma de vida. Los aspectos sobre altruismo, compasión y de la actitud hacia la iluminación, el desapego sobre situaciones y personas, el valor de nuestra vida, son conceptos valorables y extraordinarios. Discrepo en lo que respecta a que la esencia de nuestra existencia es el sufrimiento, pues considero que hay un pesimismo encubierto y que no da esperanzas. Además, la vida es un regalo que se nos proporciona, y creo que lo mejor que podemos hacer es aprender de las experiencias, ya sea malas o buenas, ser buenas personas, tener una actitud optimista y positiva ante la vida, ser felices no importa si tenemos mucho o poco. Sólo así podremos llegar a Trascender y ser uno con la Eternidad.